Europa

  La CE abrirá un procedimiento a Francia y estudia expedientar a otros 15 países de la UE

Considera que el país galo no ha introducido en la legislación francesa las garantías procesales que la UE exige en el marco de la libre circulación de personas

La comisaria europea de Justicia, Viviane Reding durante la reunión de hoy. ABC

Bruselas - 29/09/2010

La Comisión Europea ha tomado la decisión de iniciar un procedimiento de infracción contra Francia por el incumplimiento de la legislación comunitaria, según ha anunciado la comisaria de Justicia, Viviane Reding. «Hemos decidido iniciar procedimientos de infracción»

La razón es que «Francia no ha traspuesto a la legislación francesa las garantías procesales» que exige para los ciudadanos europeos una directiva de 2004 sobre libre circulación de personas dentro de la Unión Europea. Estas garantías se refieren, en particular, a las normas que se aplican en el marco de la libre circulación de ciudadanos de la UE en el territorio comunitario, y podrían ser vulneradas por la controvertida política del Gobierno Sarkozy de expulsiones de ciudadanos rumanos y búlgaros.  «La Comisión ha tomado hoy la decisión política de iniciar procedimientos de infracción por no trasposición» de la legislación, dijo una fuente europea. "La decisión formal se tomará en octubre, salvo que Francia responda de forma favorable a las críticas por parte de Bruselas», agregó.

Los comisarios europeos de Justicia, Viviane Reding; Interior, Cecilia Malmstrom, y Asuntos Sociales, Laszlo Andor, han presentado esta mañana en el colegio de comisarios los resultados de su análisis jurídico y político sobre las controvertidas expulsiones de rumanos. Durante dos horas, el Ejecutivo comunitario ha debatido esas conclusiones y ha tomado la decisión de abrir un procedimiento de infracción contra Francia, que podría acabar ante el Tribunal de Justicia europeo de Luxemburgo.

Bruselas tiene dos líneas de actuación en este caso, una es verificar si se ha traspuesto correctamente la directiva europea sobre libre circulación de 2004, pues los expulsados eran ciudadanos comunitarios. En este sentido, la CE estudia la apertura de expedientes a un total de 15 de los 27 países de la UE por defectos de trasposición o mala aplicación de esta directiva, por lo que Bruselas podría aprovechar para anunciar procedimientos de infracción contra más países. La segunda línea de investigación versa sobre el respeto o no del derecho a la no discriminación por razón de pertenencia a una etnia.

Tras la reunión del Colegio de comisarios, los titulares de Justicia, Interior y Asuntos Sociales, presentarán los resultados del análisis al Parlamento Europeo, que la pasada semana mostró un mayoritario apoyo a la investigación incoada por la CE contra Francia.

Independientemente del procedimiento de infracción, la Comisión Europea anunció la semana pasada que presentará antes de final de año una propuesta de estrategia para la integración de los gitanos, programa para el que se tomará como base las conclusiones de la cumbre que se celebró sobre el asunto en Córdoba (España) en abril.

Fuentes: ABC / El País

Tres opciones sobre la mesa

Tras dos semanas de reproches, excesos verbales y hasta una bronca personal entre Durao Barroso y Nicolas Sarkozy, la Comisión Europea evita hablar de discriminación étnica, como llegó a decir Reding. Sobre el papel, los comisarios europeos tenían tres opciones: archivar el caso; abrir un proceso de infracción contra Francia por defectos en la legislación francesa y abrir un proceso sin precedentes por violación de los derechos fundamentales.

El pasado 14 de septiembre, una Reding indignada por los constantes menosprecios del Gobierno francés hacia Bruselas, acusó a Francia de haber incurrido en el tercer escenario, de estar perpetrando una deportación colectiva por razones étnicas. Su prueba de cargo era una circular fechada el 5 de agosto y en la que el Ministerio del Interior francés ordenaba a sus prefectos desmantelar de manera preferente "campamentos de gitanos".

"Pensaba que Europa no volvería a ver algo así después la segunda guerra mundial", bramó la comisaría, iniciando así una espiral de reproches, culminada en la discusión a voz en grito entre Sarkozy y el presidente de la Comisión, Durao Barroso, durante la cumbre europea del 16 de septiembre.

Búsqueda de una "decisión equilibrada"

Sobre la cuestión de fondo, Francia respondió a la Comisión que esa circular era errónea y había sido anulada, y aseguró que en ningún caso estaba expulsando a gitanos por el hecho de serlos, sino sólo a los que residían en su territorio irregularmente.

Las autoridades francesas se amparan en que la libertad de establecimiento en la UE no es un derecho absoluto. A partir del tercer mes de estancia, sólo pueden ejercerlo quienes demuestren tener medios suficientes para subsistir en el país de acogida. No hay discriminación étnica, aseguran, sólo aplicación de la ley.

En las dos últimas semanas, el equipo de juristas de la Comisión Europea han tratado de comprobar si esa es la verdad. Fuentes europeas destacan la "muy buena colaboración" que han mostrado desde entonces las autoridades francesas.

Pero, como avanzó Reding el 14 de septiembre, Bruselas tiene una segunda objeción: Francia no ha transpuesto plenamente en su ordenamiento legal la directiva europea de 2004 sobre garantías jurídicas en los procesos de repatriación.

No es un problema sólo francés -al menos cuatro estados más no han hecho aún sus deberes legales en la materia-. Pero da a la Comisión Europea la oportunidad de abrir un expediente contra Francia, sin llegar a acusarla de delitos mayores.

Según una fuente cercana al caso, es una "decisión equilibrada" ya que permitirá tanto a la Comisión y como al gobierno francés salvar la cara tras haber protagonizado uno de los conflictos más agrios en la historia de la Unión Europea.

Fuente: RTVE

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